“En su mayoría han sido casos de violencia sexual, adolescentes que están siendo abusadas, lamentablemente, por las mismas personas que están alrededor de ellas: padrastros, papás, tíos. La línea de emergencia no para de sonar, se atiende constantemente y no solo dicha línea, sino los acompañamientos que se están dando. Creemos que la violencia sigue presente, sin embargo, nosotras estamos buscando redoblar esfuerzos para dar respuestas, sobre todo buscando que las instituciones asuman su rol, porque son ellas las que tienen que garantizar los derechos de las mujeres, sobre todo el derecho a una vida libre de violencia”, explicó Mejía.