Foto/Reina Ponce
Por Colectiva Las Hijas de Safo
La “L” es la primera letra que conforma las siglas que identifican a la comunidad de la diversidad sexual, la “L” de Lesbiana. A pesar de ser la primera letra seguimos siendo colocadas en un segundo plano, tanto en las celebraciones mediáticas como en la cotidianidad.
Nos sumamos cada 28J desde la resistencia de las lógicas capitalistas y por supuesto desde la resistencia al sistema patriarcal, que aunque se vista de colores, patriarcal se queda. Nos cuestionamos además el contenido político que acompaña las celebraciones en el marco del 28J, el cual debe ser más pensado, debe interpelar a la reflexión individual y colectiva, y esta reflexión nos pueda llevar a sanar los cuerpos, las historias y al sanar proyectarnos desde el amor.
Estamos convencidas que para conmemorar esta fecha esta debe estar hilvanada completamente con nuestra lucha política, reivindicando el carácter permanente de la lucha contra el sistema que nos oprime, de acuerdo al origen de esta conmemoración nos sumamos. Seguimos resistiendo como antes a la violencia sistemática que atraviesa la clase, la raza y los cuerpos.
Las lesbianas feministas nos juntamos para celebrar desde el placer y la alegría, yendo en contra de los discursos de dominación, cargados de clasismo y racismo, provenientes de la clase dominante “los hombres”, seguiremos gritando que la civilización patriarcal se sostiene por pactos y tratos amorosos entre ellos. A pesar de las diversidades que les atraviesan, siguen siendo profundamente misóginos, lesbofóbicos, clasistas, racista y gordofóbicos, lo que se traduce en un soporte significativo para este sistema patriarcal que nos oprime.
Sin embargo, hay más alternativas y lo sabemos, por eso, seguimos luchando por cambiar el orden simbólico de esta cultura dominante y tirar estas estructuras opresoras de dominación a través de la irrupción de la heterosexualidad obligatoria de la privación sexual y político, la militarización, el racismo, la imposición moral y religiosa, los modelos económicos y discriminación sobre nuestras cuerpas.
Reivindicamos esta fecha por su contenido político, por su contenido crítico al sistema, nos unimos a su conmemoración desde el amor y el reconocimiento de las diversidades las cuales respetamos profundamente. Reconocemos la alegría, el placer y la sanación como bienes necesarios para la lucha y la resistencia.
Aborto libre para todas, mujeres libres para decidir, lesbiandad como una lucha concreta para el heteropatriarcado capitalista.