Medidas sin enfoque de género siguen impactando en los cuerpos de las mujeres

Por Keyla Cáceres

Esta semana el fiscal informó sobre la capturado de Ronald Eduardo Durán por el delito de Violación Agravada y Privación de Libertad, las víctimas son dos mujeres que laboran como gestoras de tráfico, por lo tanto se alude a la responsabilidad del Viceministerio de Transporte, quien no les  brindó el transporte para regresar a su casa. Sin embargo, al exigir una respuesta, el ministro de obras públicas, Romeo Rodríguez, dijo en su cuenta de Twitter que ellas eran contratadas por una empresa privada y que ésta era la encargada de brindar el transporte. En otras palabras se ha lavado las manos, pero es imposible no tener responsabilidad cuando es parte de un gabinete de gobierno que no ha contemplado la situación de las mujeres antes de tomar estas medidas que carecen de todo enfoque de género.

Por eso digo abiertamente que Nayib Bukele se convirtió en el cómplice del violador Durán porque las medidas implementadas para contener el virus no tienen un enfoque de género ni mucho menos de derechos humanos, no lo decimos como cliché es una realidad que está costando la vida de mujeres, jóvenes, adolescentes y niñas de este país.

¿Con qué criterio y plan estratégico suspendieron el transporte público?, ¿Fue con la misma intención de mandar a las personas a las oficinas de los CENADES? Pareciera que lo que busca las autoridades y el presidente de la república es una purga para las mujeres y poblaciones más vulnerables en este país.

No es cierto que el único problema de emergencia es el COVID-19 tenemos más de 18 mujeres asesinadas en lo que va de la cuarentena, esa también es pandemia, y no de hoy, de siempre. Sin embargo, las autoridades no prestan atención. Por esas 18 mujeres asesinadas no hay -ni siquiera- un pronunciamiento por parte del ejecutivo. 

A los feminicidios se suma la falta de atención a sectores vulnerables como las trabajadoras sexuales, que debido a la emergencia no están trabajando, muchas son jefas de hogar y no tienen para alimentar a sus familias, eso solo demuestra el desconocimiento de la situación de las mujeres en el país por parte del gobierno.

Para muchas mujeres el mayor estrés en esta pandemia ha sido la falta de alimentos para su familia, hoy por hoy considero que estas autoridades no revisaron ni las encuestas de hogares múltiples de la Dirección General de Estadística y Censos.

¿Cómo es posible que a estas altura no tengamos un plan de contingencia con enfoque de género y DDHH?, se les olvida que siempre en las guerras, en la paz, en la democracia y en la cuarentena los cuerpos mayormente expuestos son los de las mujeres y poblaciones vulnerables, como los de la disidencias sexuales.

La agresión sufrida por las gestoras es la respuesta de la incapacidad de pensar en las mujeres que están atendiendo la pandemia, así como de “romantizar” la falta de transporte para las enfermeras de este país, las cajeras de los supermercados que tienen que pagar extra para que las lleven a su vivienda a las 8 de la noche, ellas también están en primera línea igual que las policías que están sin licencia.

Seguir implementando medidas a ciegas, sin planificar y con datos reales ya no es viable, la vida y la salud de las mujeres está en riesgo, no solo por el virus, si no por los policías que argumentando que sos pandillera te matan, mientras buscas un regalo para el día de la madre, no olvidemos que en el país viven hombres heterosexuales misóginos como algunos de los que integran el gabinete de gobierno.