1. Esta ley nace como iniciativa de organizaciones feministas y de mujeres en procesos de reflexión colectiva, asambleas y consultas territoriales; y luego es tomada, reformada y presentada ante la Asamblea Nacional como iniciativa del Poder Judicial.
“Ésta es la ley con más historia en el movimiento de mujeres de Nicaragua. Tanto sus contenidos como su nombre tienen treinta años de historia, de esfuerzos y de luchas de dos generaciones de mujeres nicaragüenses (Solís: 2013)”.