El logro de su libertad se obtuvo tras la aceptación de un proceso abreviado, los defensores tuvieron que aceptar las acusaciones y por medio de la suspensión condicional de la ejecución de la pena, la condena de prisión fue reemplazada con 3 años de cumplimiento de regla de conducta. Esta resolución prohíbe la participación de actos violentos, pero no de actividades relacionadas a derechos fundamentales.
Por Redacción
Este 17 de diciembre, Alejando Henríquez y José Ángel Pérez obtuvieron su libertad, tras siete meses en detención. Esta decisión por parte del Juzgado Segundo de Instrucción de Santa Tecla es el resultado de un proceso abreviado.
El juzgado dictaminó la condena de dos años por el delito de resistencia agresiva y un año de prisión por desórdenes públicos, con base a los delitos que tanto Alejandro Henriquez y como José Ángel Pérez tuvieron que aceptar.
Esta condena ha sido sustituida por medio del beneficio de la suspensión condicional de la ejecución de la pena, lo que significa que la pena de prisión será reemplazada por 3 años de cumplimiento de reglas de conducta.
“Lo más importante para nosotros es que personas inocentes que participaron el 12 de mayo en protestas pacíficas y que fueron injustamente detenidas, y han pasado hasta diciembre del año 2025 en situación de detención, han recuperado su libertad”, señaló Oswaldo Feussier, abogado defensor.
Fueron siete meses que Alejandro, abogado, ambientalista y defensor, junto con José Ángel, líder comunitario y presidente de la Cooperativa El Bosque, estuvieron en detención tras acompañar las concentraciones pacíficas que habitantes de la Cooperativa El Bosque realizaron ante la amenaza del desalojo de 300 familias, que perderían su vivienda y fuentes de trabajo, y que finalizó con la represión de agentes de la Policía Militar y la UMO.
Pese a las pruebas que demostraban su inocencia, el tribunal dictó la detención provisional en junio y lo reafirmó en la audiencia especial de revisión de medidas, La Fiscalía, ante la falta de pruebas e investigación a pruebas de descargo, aceptó el proceso abreviado para que los acusados aceptaran los delitos.
La defensa señala que las recomendaciones y decisiones que han hecho sobre el caso han sido con base al contexto que no ofrece garantías ni cumplimientos en el Estado de Derecho. Por lo que el proceso abreviado fue una oportunidad de obtener la libertad de Alejandro Henríquez y José Ángel Pérez.
“Era la salida que teníamos, la salida legal y la tomamos, aprovechando que la fiscalía había dado el visto bueno, se aceptó el proceso abreviado” afirmó Alejandro Henríquez, quien tras la audiencia especial logró reunirse con su familia.
Sobre su situación de salud, ambos defensores enfrentan problemas en la piel, que deberán recibir atención médica.
A la salida del juzgado, José Ángel Pérez agradeció el apoyo que le han dado al caso y Alejandro Henríquez manifestó su gratitud ante el apoyo internacional, y declaró que su convicción no ha cambiado, aseguró que seguirá haciendo su trabajo de defensa de derechos humanos y acompañando a las comunidades frente la injusticia del robo y despojo del agua y la tierra.
“Me tocará cumplir las medidas del proceso abreviado, pero eso no implica que mis ideales y mi convicción hayan cambiado” dijo.
Una de las reglas impuestas por el tribunal es no participar en actividades por las que ha sido condenado. De acuerdo al abogado Oswaldo Feusier, esta norma no aplica para el ejercicio de los derechos humanos. Los defensores no pueden participar en actos violentos, que es distinto a la práctica de actividades en el ejercicio de derechos fundamentales como marchas y ser parte de organizaciones.
