#8M: El Salvador será todo feminista

Foto/Reina Ponce

Por Fátima Cruz y Reina Ponce

Mujeres feministas reivindican el 8 de marzo, Día de la mujer trabajadora,  donde exigieron políticas públicas que generen cambios estructurales y un verdadero compromiso del Estado salvadoreño.

Jóvenes feministas gritaban consignas en la marcha. Foto/Reina Ponce.

 

Miles de mujeres feministas, en su mayoría jóvenes, se tomaron las calles en señal de protesta y resistencia por las vidas de las mujeres, libertades y autonomías. Marcharon para reclamar las deudas históricas y celebrar los logros de sus luchas expresaron en un comunicado.

Movimiento joven feminista se une para denunciar el sistema opresor de sus cuerpos, el sistema patriarcal que las sigue asesinando. Foto/Reina Ponce.

 

El recorrido que se realizó hasta la Plaza Gerardo Barrios tuvo una gran participación del movimiento joven feminista quienes bajo el lema “Resistimos a la guerra” expusieron todas las violencias que viven en el país y las deudas que el Estado tiene con las mujeres, jóvenes y niñas.

Una acción de protesta ante las muertes violentas de las mujeres en El Salvador. Foto/Reina Ponce.

 

“Este día es para reivindicar, exigir y pedirle al Estado salvadoreño que deje de negociar con nuestros derechos y que ponga presupuesto para políticas públicas para las mujeres y que se garantice una vida libre de violencia” expresó Keyla Cáceres de la Red de Colectivas Juveniles Feministas.

En memorias de todas las mujeres y niñas víctimas de feminicidios se pronunciaron sus nombre. Entre estos se escucharon: Katy Miranda, Carla Ayala, Jocelyn Abarca. Foto/Reina Ponce.

 

“Nos faltan más de 232 mujeres., nos faltan 3 mil niñas víctimas de violencia sexual, faltan más de 18 mujeres criminalizadas por emergencias obstétricas debido a la penalización absoluta del aborto, nos faltan más de 100 mujeres víctimas de transfeminicidio” lamentó Cáceres. 

Con nombres y mensajes recordaron a las mujeres víctimas de feminicidio y a otras mujeres que todavía se encuentran desaparecidas. Foto/Reina Ponce.

 

Las demandas fueron acuerpadas por todas las mujeres jóvenes que encabezaron la movilización.

Mujeres trans durante la concentración en el Centro Histórico de San Salvador. Foto/Reina Ponce.

 

La joven feminista, Mayela Zelaya, mencionó “como mujeres jóvenes estamos molestas de tener miedo y coraje en cada cuadra que transitamos. Estamos cansadas que cada vez que salimos tenemos la incertidumbre de no volver a casa”. 

Las jóvenes feministas muestran su rabia ante las violencias que viven y el silencio del Estado. Foto/Reina Ponce.

 

“Queremos exigir la libertad que ellos siempre han tenido. Esa libertad que siempre fue nuestra pero nos fue arrebatada. Queremos que nuestros cuerpos sean realmente nuestros, que las niñas, las adolescentes y las mujeres dejen de tener miedo, que sepan que luchamos por ellas, que son capaces de decidir, que tienen voz y sobre todo que son completas y autosuficientes” expresó Zelaya.

Las jóvenes reclaman vivir libres y sin miedo Foto/Reina Ponce.

 

Los mensajes también le correspondieron a las universidades donde las jóvenes exigen espacios libres de acoso. Foto/Reina Ponce.

 

Diversas mujeres, diversas luchas en la búsqueda de sus derechos y por un El Salvador feminista. Foto/Reina Ponce.

 

«El Estado opresor es un macho violador» se leía en uno de los carteles. Foto/Reina Ponce.

 

Todas las mujeres en ese día de luchas demandaron la despenalización del aborto por la vida y salud de las mujeres, el cese a la impunidad en casos de feminicidios y crímenes de odio contra mujeres trans, respeto a los derechos humanos laborales de las trabajadoras de maquila y bordadoras a domicilio, transformar y depurar el sistema judicial, reconocer los derechos de las personas LGBTI, acceso a la educación integral en sexualidad desde una perspectiva científica y laica.

Revolución feminista en el Centro Histótico de San Salvador que concentró a miles de mujeres de diversos territorios. Foto/Reina Ponce.

 

Con diferentes consignas como “No más impunidad queremos la verdad” marcharon las mujeres que exigen conocer a los responsables de las personas desaparecidas y asesinadas en la guerra y demandar  justicia para quienes cometieron esos crímenes. 

«No borrarán nuestra memoria», se leía, las mujeres reclaman justicia. Foto/Reina Ponce.

Gloria Anaya, Colectivo Herbert Anaya reclama que el presidente abra y entregue los archivos de la Fuerza Armada para que todas las que han luchado durante muchos años por conocer la verdad sobre sus familiares tengan justicia. 

Imelda Martinez, de Asociación de Mujeres ciegas de El Salvador, mencionó  “ser mujer y tener una discapacidad aumenta la discriminación y es por eso que es importante continuar luchando” por el respeto a sus derechos. 

Las mujeres con discapacidad macharon reclamando una ley de inclusión . Foto/Reina Ponce.

 

Con carteles, pintura, arte, música, fuerza se manifestaron las jóvenes feministas ante el sistema que sigue oprimiendo sus cuerpos. 

Despenalizar el aborto para que las mujeres puedan decidir fue una de las demandas. Foto/Reina Ponce.

 

Los agresores fueron denunciados a través de un tendedero en que las mujeres colocaron el nombre y denuncias de quienes las han violentado. 

En el tendedero de denuncias colocado frente a catedral se leían nombres de hombres acusados como agresores. Foto/Reina Ponce.

 

Para denunciar el sistema que violenta a todas las mujeres y niñas realizaron «Un violador en tu camino» con adaptaciones al contexto salvadoreño para exponer el sistema de impunidad que existe en el país.

«El violador eres tú» se escuchaba en la Plaza Gerardo Barrios. Foto/Reina Ponce.

 

La potencia de los tambores de batucada es una forma de resistencia que junto a  las miles de voces gritaron “El violador eres tú”. El famoso canto «Un violador en tu camino» entre el movimiento feminista que denuncia a todos los agresores, para decir que las están matando, violentando y un Estado que transgreden a las mujeres, que no permiten tener de una libre de violencia. 

«Los tambores también son una forma de resistencia» en el movimiento feminista comentó una integrante. Foto/Reina Ponce.

 

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