
La Fundación de Estudios para la Aplicación del Derecho (FESPAD) anunció este 4 de septiembre el cierre de operaciones bajo la figura de fundación, luego de casi 37 años de existencia.
Por Redacción.
La decisión, calificada como “dolorosa pero coherente”, responde a las condiciones impuestas por la Ley de Agentes Extranjeros (LAEX), que según la organización hacen inviable su continuidad con personalidad jurídica.
“Pretender seguir operando bajo las condiciones impuestas por la LAEX implicaría abandonar nuestra finalidad”, señalaron en un comunicado, recordando que su propósito ha sido “propiciar el más amplio y correcto conocimiento y aplicación del Derecho en El Salvador, como contribución al desarrollo de una convivencia social armónica, justa y democrática, basada en el Estado Constitucional de Derecho y el respeto a los derechos humanos”.
Desde 1988, FESPAD ha acompañado a comunidades, sindicatos, organizaciones sociales, funcionarios públicos y víctimas en la búsqueda de justicia, consolidándose como un referente en la defensa del Estado de derecho y la dignidad humana.
La organización destacó que, a lo largo de más de tres décadas, su misión ha estado presente en calles, tribunales, debates públicos y mesas de política pública, siempre bajo un compromiso ético y profesional.
Implicaciones de la LAEX para las organizaciones de la sociedad civil
La organización señala que la entrada en vigor de la LAEX coloca a las organizaciones de la sociedad civil en una “encrucijada ineludible”, pues impone un marco restrictivo que genera inseguridad jurídica con posibles multas y sanciones discrecionales, vuelve insostenible financieramente a instituciones que no estén exentas del impuesto del 30%, e impide cumplir libremente con la misión institucional orientada a los derechos humanos.
En su mensaje de despedida, FESPAD agradeció a las comunidades, organizaciones hermanas, sindicatos, medios de comunicación, funcionarios y aliados que formaron parte de su caminar institucional.
“Después de casi 37 años de funcionamiento, nuestros fines institucionales están esparcidos, arraigados y seguirán vigentes en el actuar de las miles de personas que han sido formadas en diversos temas con un amplio enfoque de derechos humanos”, afirmaron.
Aunque cierra su personalidad jurídica como fundación, FESPAD subrayó que su proyecto y propósito “sigue vivo en las almas, corazones y actuar de quienes han sido parte de él”, reafirmando su convicción de que un mejor El Salvador es posible.
Concluyeron con un mensaje que resume su trayectoria: “¡Nuestra lucha es por la dignidad de las personas!”