La Organización de Mujeres Salvadoreña por la Paz (ORMUSA) presentó el Estudio Mujer y Mercado Laboral 2022: la protección de la maternidad en las políticas públicas. Este análisis abarca la discriminación basada en la maternidad, la participación laboral de las mujeres y la aplicación de las políticas públicas que deberían favorecer a las mujeres en el embarazo, parto y posparto.
Por Ana Gómez
La Organización de Mujeres Salvadoreña por la Paz (ORMUSA) presentó el Estudio Mujer y Mercado Laboral 2022: la protección de la maternidad en las políticas públicas, en la que incluye un análisis crítico sobre la búsqueda de acceso a la justicia y vulneraciones de los derechos de las mujeres durante el embarazo, parto y posparto en el mercado laboral.
El estudio indicó que existe una penalización de la maternidad en el empleo. La tasa de ocupación en mujeres entre 25 y 54 años es de 61.9% “sin niñez menor de 6 años”, mientras que en la tasa de ocupación de 51.0% son mujeres entre 25 y 54 años “con niñez menores de 6”, en comparación de hombres con (94.4%) o sin niñez menores de 6 años (91.6%).
Otro aspecto de la penalización de la maternidad es la brecha salarial, ya que aumenta a comparación de los salarios de mujeres sin niñas y niños, sin omitir que las mujeres en general están expuestas a salarios bajos en comparación a los hombres.
“Las mujeres que no tienen servicio para que cuiden a estos niños o niñas tienen más dificultades para incorporarse al mercado laboral, debido a que existen prejuicios desde las empresas que consideran que las mujeres van a estar más enfocadas en el cuidado y no van a tener la misma productividad que el resto de su personal” dijo Silvia Rubio, consultora de la investigación, al mencionar una de las razones de rechazo de las mujeres en el mercado laboral.
Las mujeres cuyos derechos fueron vulnerados por motivos de embarazo, parto y posparto acudieron a las instituciones como Procuraduría General de la República y Ministerio de Trabajo y Previsión Social. En el estudio se registró que en 2022 se realizaron 114 inspecciones debido al despido de mujeres embarazadas.
Asimismo, por medio de 25 expedientes que ORMUSA tuvo acceso, determinaron algunos motivos de despedido como: a causa de permisos laborales para atender controles médicos de mujeres embarazadas, por estado de embarazo y prejuicio de mujeres en ese estado, por acoso sexual, motivos relacionados al posparto y despidos disfrazados por corte de personal.
En 2022, de 98,522 mujeres que tuvieron un parto, solo 12.4% de mujeres tuvieron un ingreso seguro en el período posnatal, a través de la entrega del subsidio de maternidad por el Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS). Dentro de 12.4%, la mayoría proviene del sector comercio, el 27.3%, de manufactura, 26.7%, público, 18.8% y agricultura fue solo 1%.
ORMUSA señaló que los estándares actuales sobre de los Centros de Atención Integral de Primera Infancia (CAPI) en costos, distancia y horarios no responden a las necesidades de mujeres que se encuentran en el sector informal y de zonas rurales. Ya que para la instalación de un CAPI debe existir una empresa con más de 100 personas trabajadoras
Sobre la situación económica y laboral de mujeres en 2023, Iliana Álvarez, catedrática e investigadora del Departamento de Economía de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas, dijo que se mantienen tres elementos importantes sobre la poca participación de las mujeres en el ámbito laboral: la feminización del tiempo de trabajo de cuidados, alta maternalización del trabajo de cuidados y crisis multidimensional de los cuidados.
ORMUSA recomienda aplicar políticas como el subsidio de maternidad y los CAPI para mujeres en los territorios, de zonas rurales y del sector informal. Así mismo, visibilizar las estadísticas que evidencien las vulneraciones de derechos de las mujeres.