Trabajadoras de maquila en situación de hambruna tras 70 días sin salario

Foto/Cortesía Mujeres Transformando

Por Reina Ponce

Las medidas implementadas contra la Pandemia por la COVID-19 han impactado fuertemente en las trabajadoras de maquila, diversas empresas textiles cerraron y dejaron a miles de mujeres sin ingresos, algunas fueron suspendidas sin goce de salario y llevan mas de 70 días sin salario, según organizaciones de mujeres la gran mayoría se encuentra en situación de hambruna por ser el pago de la maquila el único ingreso de la familia. 

Las maquilas son una de las principales fuentes de empleo en el país, principalmente para las mujeres. Según datos de la Cámara de la Industria Textil y Confección (CAMTEX), estas generan alrededor de 240,000 empleos, 80,000 directos y alrededor de 160,000 indirectos. Boletín ECL.

Empresas del sector maquila se vieron obligadas a cerrar operaciones debido a las medidas que se tomaron en atención a la pandemia por el COVID-19 desde marzo pasado. Esta situación tiene fuertes impactos para las y los trabajadores sobre todo para las mujeres, pues muchas solo cuentan con ese ingreso para mantener a su familia.

“Es una situación terrible, no hay para pagar la luz y el agua, más el riesgo que los bancos que les quiten lo poco que tienen en sus hogares, la falta de alimento para la familia, más la cuarentena que no hay espacios de recreación, muchas están al cuido de toda la familia y algunas tiene opresores en su casa, están expuesta a la violencia, esta situación nos pone más vulnerables” expresa Rosa Granados del Sindicato de trabajadoras textiles.

Aproximadamente 79 mil personas del sector maquila se han visto afectadas durante este periodo del COVID-19, las condiciones se han vuelto precarias y graves para las mujeres “están cayendo en hambruna ya que llevan más de 70 días en cuarentena”, muchas de ellas no fueron beneficiadas con los 300 dólares que dio el gobierno y en algunos casos no les ha llegado la bolsa de víveres que se han repartido señala Mujeres Transformando.

El Código de Trabajo en el artículo 36 establece la suspensión de contrato, el gobierno dijo que las empresas debían seguir pagando los salarios, sin embargo no se ha cumplido.

La situación que viven las trabajadoras de maquila se agrava debido a las vulneraciones de derechos “No nos están pagando salarios por la cuarentena impuesta por el gobierno y esto ha llevado al no pago de ISSS, AFP y bancos. Claramente se nos están violentando nuestros derechos sindicales” manifiesta Granados. La suspensión de contrato, el no pago de prestaciones, de salarios, o recibirlos incompletos son algunos de los problemas a los que se enfrentan.

“Hay casos que el ISSS no está dando la atención de control requerido a las mujeres embarazadas, también no dar asistencia al parto a las trabajadoras, por que las empresas no están pagando la planilla del ISSS y están dando por despedidas a las empleadas, hay dos casos en FyD que no le pagaron la incapacidad por maternidad”. 

La Procuraduría para la Defensa de los Derechos Humanos entre el 21 de marzo y el 13 de mayo registró 209 denuncias por falta de insumos de protección laboral, falta de pago de salarios y prestaciones, entre otros. 

Asimismo expresó a Revista La Brújula una empleada de la maquila Hermanos Textil que prefirió reservar su nombre. “No tenemos seguro, no podemos pasar una consulta porque no nos están pagando seguro, estamos completamente desempleadas. Nos está afectando bastante económicamente porque muchas personas dependemos solo de ese trabajo y el encierro nos afecta estar en la casa y saber que no tenemos que darle de comer a nuestros hijos”.

“Recibieron salario completo hasta la primera quincena de marzo y luego en la segunda quincena de marzo solo les pagaron tres días y les dijeron que los otros días se los iba a pagar el Seguro Social en concepto de incapacidad porque así lo estableció el gobierno, fueron pero no les pagaron nada” menciona Montserrat Arévalo de Mujeres Transformando.

Algunas de las trabajadoras de Hermanos textil recurrieron al Ministerio de Trabajo pero la respuesta fue que las maquilas se declararon en quiebra. En la empresa Hermanos Textil les dijeron que les iba a dar préstamos pero luego desistieron de hacerlo a pesar que el banco ya los había aprobado.

Hermanos Textil S.A. de C.V. ubicada en la zona franca de San Marcos se dedica a la producción de prendas de vestir, tienen 800 trabajadores, en su mayoría mujeres. La empresa suspendió laborales el 18 de marzo “Simplemente nos despacharon que estuviéramos en la casa pero no saben si comemos o no” expresó la trabajadora.

Foto/Cortesía.

Las trabajadoras de maquila expresan su preocupación por su situación incierta, pues no saben si después de la cuarentena las volverán a llamar para trabajar nuevamente. Además manifiestan que ni Ministerio de Trabajo ni el Ejecutivo han tomado mayores acciones a sus demandas “actualmente el gobierno no da ninguna solución a los trabajadores, sólo a los empresarios, lo cual pone en detrimento a la clase obrera”.

Monserrat Arévalo de Mujeres Transformando considera que debe haber una reapertura, pero de forma gradual y con protocolos estrictos donde haya un enfoque de derechos humanos y laborales de las trabajadoras. Además el Ministerio de Trabajo debe estar vigilante a que las empresas implementen protocolos de bioseguridad para que no haya contagios por COVID-19.

Las empresas deben contar con un  comité de seguridad y salud ocupacional «encargados de participar en la capacitación, evaluación, supervisión, promoción, difusión y asesoría para la prevención de riesgos ocupacionales», (artículo 7 de la Ley General de prevención de riesgos en los lugares de trabajo).

“El llamado es a que empiecen a trabajar protocolos pero incorporando a las trabajadoras en la construcción porque son ellas, sus cuerpos, sus vidas y las de sus familias las que se van a ver afectadas y que luego no ver condiciones de salud para atenderlas con calidad” dice Arévalo.

Las trabajadoras de maquila demandan el pago de salarios, que no haya despidos durante la cuarentena, la estabilidad laboral después de la cuarentena y que inicien procesos y protocolos de seguridad para la prevención del COVID-19 en los lugares de trabajo.