30 de julio: estudiantes demandan educación, salud y liberación de defensores

Por Redacción

Cada año, estudiantes de la Universidad de El Salvador (UES) marchan por las calles del Gran San Salvador para conmemorar a los mártires del 30 de julio. Este 2025 se cumplieron 50 años de la masacre estudiantil de 1975, cuando jóvenes fueron asesinados por manifestarse en contra de las violaciones a los derechos humanos y por denunciar los excesivos gastos del gobierno de turno en un concurso de belleza.

Han pasado cinco décadas sin justicia ni reparación para las víctimas y sus familias. Sin embargo, la memoria de ese hecho sigue viva y se niega al olvido.

En esta fotogalería, La Brújula documentó el recorrido de los estudiantes desde las afueras de la UES hasta el Monumento a los Mártires del 30 de Julio. Las imágenes también reflejan las demandas actuales por mejores condiciones en el ámbito educativo, atención a la salud mental, justicia y la liberación de personas detenidas bajo el régimen de excepción.

Estudiantes organizados marcharon desde la entrada de la Facultad de Ciencias y Humanidades de la UES, hasta el Monumento a los Mártires del 30 de Julio, conmemorando medio siglo de lucha del movimiento estudiantil.
Cada año, las demandas se amplían: ya no se limitan al ámbito educativo, que se percibe cada vez más debilitado, sino que abarcan también otras luchas sociales en la búsqueda de justicia.
Las organizaciones estudiantiles denunciaron recortes al presupuesto educativo y el cierre de escuelas. Asimismo, exigieron la liberación de estudiantes detenidos en el marco del régimen de excepción.
La marcha hizo una pausa frente a la escuela Francisco Morazán, donde recordaron al estudiante de periodismo José Luis Bernal. En ese momento, se hizo un llamado urgente a priorizar la salud mental de la población, un rubro que actualmente solo recibe el 2 % del presupuesto nacional.
La comunidad estudiantil recordó el legado de quienes hace 50 años dieron su vida en defensa de la autonomía universitaria y los derechos humanos.
Durante la jornada, se escucharon consignas como: “El pueblo lo dice: primero lo primero, salud y educación” y “Las calles se conquistan con lucha organizada”.
La marcha contó con el acompañamiento de organizaciones como MOVIR. Madres y padres portaban carteles exigiendo justicia para sus hijas e hijos detenidos en el contexto del régimen de excepción.
Finalmente, las organizaciones estudiantiles exigieron la liberación de personas defensoras de derechos humanos, también capturadas en el mismo contexto: Ruth López, Alejandro Henríquez y José Ángel Pérez.