Fotografía tomada de Internet
Redacción La Brújula
ONU Mujeres manifiesta que ante el actual contexto del COVID-19 y sus impactos urge enfrentar la pandemia de violencia contra mujeres y niñas, pues esta violación de derechos humanos afecta a una de cada tres mujeres a lo largo de su vida.
En 2018 se registraron alrededor de 3,800 feminicidios “se estima que la magnitud real del fenómeno está subestimada y que la emergencia sanitaria lo está agravando aún más” expuso en el documento “prevención de la violencia contra las mujeres frente a covid-19 en América Latina y el Caribe”.
En dicho documento destaca que las medidas en atención a combatir el COVID-19 como la cuarentena exacerbarán la violencia contra niñas y mujeres “las víctimas y/o sobrevivientes se encuentran encerradas con sus perpetradores con oportunidades muy limitadas de salir de sus hogares o de buscar ayuda”.
Los hogares donde hay niñas, niños y adolescentes, el aumento de la violencia contra las mujeres tendrán un impacto negativo “estrés postraumático, depresión, ansiedad e impactos de largo plazo en su desarrollo” afirma ONU Mujeres.
Asimismo, ONU Mujeres menciona que está generando barreras para que las víctimas no puedan acceder a servicios de ayuda y que los servicios que brindan organizaciones de la sociedad civil para atender este tipo se casos se ven limitados debido a las restricciones de movilidad.
Las de denuncias durante este periodo de emergencia por COVID-19 han bajado “Esto es una consecuencia de que las mujeres no pueden salir de sus hogares o hacer llamadas porque están en contacto constante con el agresor y sus redes de apoyo son más limitadas por las medidas de cuarentena” señala.
Ante estas violencia el organismo hace una serie de recomendaciones para la prevención como garantizar que los servicios policiales y judiciales prioricen la respuesta a la violencia contra las mujeres y niñas durante y después de la crisis debida a COVID-19. Además que las regulaciones de cuarentena o de restricciones de movilidad contengan excepciones para las mujeres víctimas y/o sobrevivientes de violencia y sus hijas e hijos.
También insta a priorizar y reforzar el financiamiento de refugios, albergues o casas de acogida para mujeres que enfrentan alto riesgo de violencia y asegurar que los servicios de atención y respuesta a la violencia contra las mujeres se consideren servicios esenciales durante la pandemia.
Be the first to comment