Cooperativas de comercio justo impulsan sostenibilidad en la región latinoamericana, dice estudio

En el Año Internacional de las Cooperativas, la CLAC junto con la CEPAL presentan un estudio con el objetivo de mostrar el aporte de las cooperativas en el crecimiento económico, social y ambiental y los desafíos que enfrentan. Sin embargo, el comercio justo es una alternativa para que las cooperativas puedan obtener mejores ingresos y mejorar las condiciones de vida de sus comunidades. 

Por Redacción

La Organización de Naciones Unidas instauró el 2025 como el Año internacional de las Cooperativas, con el lema “Las cooperativas construyen un mundo mejor”, que busca resaltar su rol en la inclusión, crecimiento económico y sostenibilidad ambiental. 

En este marco, la Coordinadora Latinoamericana y del Caribe de Pequeños (as) Productores (as) y Trabajadores (as) de Comercio Justo (CLAC), en conjunto con la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), presentaron un estudio donde destaca el papel de las cooperativas de comercio justo en la región latinoamericana. 

El estudio: “Cooperativas latinoamericanas de Comercio Justo: Historias de resiliencia y sostenibilidad”  recoge la experiencias de cuatro cooperativas de más de 30 años de Colombia, República Dominicana, Brasil y Costa Rica, en relación a la gobernanza, sostenibilidad financiera, innovación, inclusión social y acción climática. 

De acuerdo a estimaciones de la CEPAL y Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), en el continente americano existen 14,758 cooperativas agropecuarias y alimentarias que agrupan a más de 3,6 millones de personas asociadas y generan empleos cerca de 1,2 millones de personas. 

“El cooperativismo es la forma de organización que permite avanzar de manera equilibrada […] con un impacto importante en las comunidades”, afirmó Ximena Olmos, consultora de CEPAL y autora del estudio. 

Los desafíos de las cooperativas son variados de acuerdo a la región y el tiempo, sin embargo existen puntos comunes como la disponibilidad de recursos económicos, técnicos, cambios de legislaciones, precios de productos, incorporación al comercio internacional, crisis climática, baja educación, baja tasa de participación de mujeres y juventudes. 

Frente a estos desafíos, el estudio demuestra que las cooperativas buscan alternativas para mejorar el trabajo que realizan y aportar a la mejoría de las condiciones de vida de sus comunidades. 

Uno de los ámbitos que retoma el estudio es la crisis climática, las cooperativas implementan  prácticas agrícolas y acciones enfocadas en la protección del agua debido a que en lugares como Brasil ya no hay acceso al agua. “En algunos países y zonas ya no hay agua, incluso en Brasil ya no tienen lluvia”, explicó Ximena. 

El informe señala un avance con la participación de las mujeres en roles productivos y de liderazgo; sin embargo, existen desafíos en el acceso a la tierra. 

“Se requiere sostenibilidad económica para profundizar en lo social y ambiental” señala el informe, ya que la exportación es la principal fuente de ingresos, el capital propio es escaso, lo que les obliga a depender de créditos externos.

Comercio Justo como una alternativa

Las cooperativas que son parte de la CLAC son productores de café, azúcar, cacao, quinoa, miel, frutas, flores, y son artesanos, e implementan el Comercio Justo como un modelo comercial que pone al centro a los seres humanos, la sostenibilidad económica, ambiental y  social. 

El producto bajo la insignia de Comercio Justo ofrece un precio mínimo que no se rige por la bolsa de valores y ofrece un reconocimiento o prima social para que los productores puedan invertir de manera colectiva. 

Josué Alejandro Mira, encargado de comercialización y tesorero de la cooperativa Ataisi de R.L. de El Salvador, señaló que con la prima social les ha servido para construir 25 viviendas de las personas asociadas, entregar canastas alimenticias y abono para sus cultivos y usarlo en la inversión de la producción agrícola. 

El estudio presentado por CLAC y CEPAL es un paso para mejorar la condiciones de las cooperativas, afirmó Yoriely Villalobos, presidenta del consejo directivo de CLAC, “es el paso inicial para buscar alianzas y hablar con el mercado para que puedan entender cuáles son las condiciones y los desafíos que enfrentan los productores y busquemos en conjunto alternativas”, dijo.